Normalmente, a partir de los 50 años, es cuando comienzan a presentarse distintos síntomas que nos acercan a la menopausia. Sin embargo, este periodo en la vida de la mujer puede presentarse en distintos momentos o bien antes o bien después.

Bienestar de la mujer

Queremos enumerar los síntomas más frecuentes para que puedas identificar en que momento te encuentras, aunque siempre será el especialista quien mejor pueda guiarte y aconsejarte, por eso no dudes en consultarle:

  • Sofocos y sudores nocturnos

    Los bochornos o sofocos son causados sobre todo por cambios hormonales en la menopausia, aunque también pueden darse por medicamentos y estilo de vida.
    La caída de hormonas confunde al hipotálamo que actúa como termostato del cuerpo y hace que de la lectura incorrecta de “demasiado caliente”. El cerebro responde a esta información indicando al corazón, vasos sanguíneos y sistema nervioso que deben reducir de inmediato el calor: el corazón bombea más rápido, aumenta la dilatación de los vasos sanguíneos en la piel para hacer circular más sangre e irradiar calor y que las glándulas sudoríparas liberen sudor para enfriar el cuerpo.
    Este mecanismo de liberación de calor es también la forma cómo el cuerpo evita el sobrecalentamiento en verano pero cuando el proceso se desencadena debido al bajón de estrógenos, la respuesta confusa del cerebro puede ser MUY INCÓMODA.
    ¿Cómo puedes actuar para aliviar este molesto síntoma? A continuación te damos una serie de consejos que pueden ayudarte:
    -Evitar los desencadenantes: Alcohol, cafeína, azúcar, estrés, alimentos picantes, alimentos calientes, bañeras de hidromasajes, saunas, duchas de agua caliente, fuentes de calor y tabaquismo… pueden provocar la activación y exacerbar los sofocos.
    -Ejercicio: parece que el ejercicio regular para reducir los sofocos. Las mujeres que tienen actividad física sufren menos episodios que las sedentarias. El ejercicio aumenta los niveles de endorfinas y existe evidencia de que las endorfinas están involucradas en la regulación de la temperatura corporal.
    -Gestión del estrés: algunas mujeres encuentran alivio a través de la meditación, el biofeedback, la respiración profunda y otras técnicas de reducción de estrés.
    – Nutrición: Se ha demostrado que con el tiempo, una dieta baja en grasa puede disminuir los sofocos en algunas mujeres, aunque esto no es una regla general. Tambien se habla de la dieta antiinflamatoria basada en la sensibilidad a los alimentos. Esta dieta está basada en frutas y verduras orgánicas ricas en antioxidantes, aves de corral y carne de reses alimentadas con pasto, salmón salvaje y grasas saludables como aceite de oliva extra virgen, aceite de coco, aguacate, ghee, frutos secos y semillas.
    -Aceite de Onagra: una excelente fuente de ácido gamma-linolénico (GLA), precursor de prostaglandinas antiinflamatorias. Se ha demostrado que el uso del aceite de onagra alivia los sofocos nocturnos.
    Osteoporosis.
    -Té verde: es especialmente rico en fitohormonas y antioxidantes. Parece ser que las mujeres que beben té verde o negro siempre tienen huesos más fuertes que las que no lo toman.
    -Cafeína: niveles elevados de cafeína en forma de café o refrescos, altera el equilibrio natural de calcio y fósforo y provoca que el calcio sea eliminado por la orina.
    -Bebidas carbonatadas: los refrescos de cola pueden contener hasta 500 mg de fósforo por porción y se debe evitar el exceso de fósforo, puesto que puede agotar el calcio de los huesos.
    -Vegetales / verduras de hojas verdes: son ricas en calcio e incluyen brócoli. coles de Bruselas, col o repollo, col rizada, acelgas y espinacas.
    -Ácidos grasos esenciales: los ácidos grasos esenciales son vitales para la densidad mineral ósea (DMO) de todo el cuerpo. El desequilibrio de ácidos grasos omega-6 con respecto a los ácidos grasos omega-3 se asocian a una menor DMO en el organismo.
    – Trebol rojo: según una investigación el trébol rojo ha demostrado que tiene un efecto positivo significativo en la mejora de la tasa de pérdida ósea, mejora de la salud cardiovascular y puede ofrecer un efecto protector contra el cáncer de mama y el de endometrio.
    – El ejercicio regular (por lo menos 3 o 4 días a la semana) ayuda a prevenir y reducir la pérdida de hueso y desempeña un papel clave en la reducción de riesgo de padecer muchos tipos de cáncer, así como enfermedades del corazón.

  • Sequedad vaginal

    Una fina capa de humedad recubre las paredes vaginales. A medida que la mujer envejece, los cambios hormonales afectan la cantidad y consistencia de los fluidos vaginales. La sequedad vaginal es un problema común durante la menopausia (debido a la reducción en los niveles de estrógeno), aunque una pobre lubricación vaginal puede ocurrir a cualquier edad.
    -Vitamina A: ayuda a mantener la integridad general de los tejidos de la piel y las membranas mucosas.
    -Hidratación: El consumo adecuado de agua es imprescindible para la producción de todas las secreciones corporales.
    -EVITAR: Duchas vaginales, jabones perfumados, baños de burbujas, ya que pueden aumentar la sequedad vaginal y la irritación en tejidos sensibles.

  • Cambios de humor

    -Incluye los alimentos con triptófano si tu humor es inestable. Los alimentos ricos en proteínas que contienen este aminoácido incluyen el pavo, el queso cottage, la avena y las legumbres. El triptófano ayuda al cerebro a producir serotonina, la cual puede moderar tu humor a lo largo del día y ayudarte a controlar tu capacidad para dormir y tu apetito.
    -Otras formas de controlar los cambios de humor es evitar omitir comidas, sobre todo el desayuno, y limitar tu consumo de azúcar.

Los molestos síntomas de la menopausia están asociados, al menos en parte, al déficit de estrógenos característico de esta etapa de la vida de la mujer. La terapia de reemplazo hormonal (TRH) fue durante mucho tiempo el tratamiento estándar para la menopausia. Sin embargo, ahora sabemos que aumenta el riesgo de padecer cáncer de mama y enfermedades del corazón y este tratamiento ha pasado a indicarse en casos muy concretos. Relacionado con esto, cada vez son más las mujeres que están recurriendo a tratamientos alternativos para el tratamiento de los síntomas que experimentan durante la menopausia.

En un proximo artículo os daremos algunos consejos para aliviar los sintomas de la menopausia de forma natural.

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